Cuando compramos algún producto electrónico o de cualquier índole, estos vienen adjunto el manual de instrucciones y la boleta de garantía donde la mayor parte del tiempo se adjunta su correspondiente folleto en diferentes idiomas, donde la traducción de su producto pasa a ser la imagen de la empresa donde el cliente por primera vez tiene contacto con la máquina, equipo, etc., y es aquí donde podemos fidelizar a nuestro futuro cliente y en este contexto el fabricante debe dar la importancia necesaria a una buena traducción a nuestro usuario final y que este sienta que no está leyendo una traducción sino más bien el manual del producto que acaba de comprar.
Los fabricantes y/o proveedores deben invertir en un equipo de traductores profesionales que estén a cargo de esta labor y puedan contar con glosarios técnicos y todas las herramientas necesarias para realizar un trabajo de calidad donde vaya en directo beneficio en la imagen de la empresa que quieran proyectar al cliente y fidelizar la marca en el mercado.
Finalmente, el cliente debe contar con toda la información necesaria del bien que ha comprado y es deber del fabricante entregarla.